“Trabajar la inteligencia emocional es esencial para el desarrollo personal y profesional de los jóvenes”
“Está comprobado que las personas emocionalmente inteligentes poseen más habilidades sociales”, según Nélida Pérez, doctora en Psicopedagogía. Hablamos con esta experta en inteligencia emocional y pensamiento creativo sobre algo tan importante para el Colegio como las emociones en la educación.
Según Nélida Pérez, el control y la identificación de las emociones son fundamentales para tomar decisiones correctas a lo largo de la vida y confiar en las propias capacidades. Por eso, trabajar la inteligencia emocional es esencial para el desarrollo personal y profesional de los alumnos, enseñándoles a identificar, empatizar y gestionar las emociones. Esto incrementa su capacidad creativa, haciéndoles más seguros de sí mismos y, por tanto más felices.
El papel de los padres es fundamental para aprender a empatizar y conocer las emociones de sus hijos, trabajándolas diariamente en el núcleo familiar para saber controlarlas y afrontarlas con una visión optimista. “¿Somos capaces de identificar las emociones y ponerles nombres? Es importantísimo que los padres desarrollen un vocabulario emocional con sus hijos para que aprendan a expresar cómo se sienten. El segundo paso, comprender qué nos quieren decir esas emociones, para después regularlas”.
Asegura que se puede enseñar a los chavales técnicas para que aprendan a gestionar las emociones. “Desde muy pequeños, se les puede enseñar estructuras, patrones y recursos que les ayuden a superar frustraciones y a gestionar conflictos; a relacionarse con los demás; a ser líderes consigo mismos; a ser asertivos, resilientes…. Sin olvidar lo más importante, a ser creativos y aprender a pensar”.
Añade esta experta en inteligencia emocional que “es importante conocer a nuestros hijos, saber cómo funciona su mente. Aprender a pensar y pensar bien, y a sentir y sentir bien”.